¿Es posible que en un blog de Filosofía no aparezca F. NIETZSCHE y pueda seguir siendo de filosofía?
Entonces, si queremos seguir manteniendo el nombre del blog, hay que introducir inmediata pero inmediatamente a este enorme, colosal, imprescindible filósofo.
Luego, lo prometido es deuda.
Asi pues...
Primero, una tarjeta de visita:
“Quien sepa respirar el aire de mis escritos sabrá que es un aire de las alturas, un aire fuerte. Hay que estar hecho para ese aire, pues de lo contrario se corre el peligro de coger un resfriado. El hielo se halla cerca, la soledad es imponente, pero qué sereno se encuentra todo dentro de la luz, ¡qué libremente se respira!, ¡cuántas cosas sentimos que están por debajo de nosotros!. Tal y como la he entendido y vivido hasta hoy, la filosofía no es otra cosa que querer vivir entre los hielos, en las altas montañas, buscar todo lo que tiene de extraño y de problemática nuestra existencia, todo lo que la moral ha venido prohibiendo hasta hoy.
Una prolongada experiencia proporcionada por este caminar en lo prohibido me ha enseñado a contemplar las causas a partir de las cuales se ha moralizado e idealizado hasta ahora; se me ha revelado la historia secreta de la filosofía, lo que hay de psicológico entre sus grandes hombres. Mi verdadera unidad de medida ha sido cada vez más preguntar qué grado de verdad soporta un espíritu, qué dosis de verdad se atreve a afrontar. Ese error consistente en creer en lo ideal no constituye una ceguera sino una cobardía. Toda conquista, todo avance en el terreno del conocimiento es consecuencia de la valentía, de la dureza y de la limpieza para con uno mismo. Yo no refuto, pues, ningún ideal; me limito a ponerme los guantes cuando estoy ante ellos. Mi filosofía triunfará algún día bajo el lema: ‘nos arrojamos en brazos de lo prohibido’. Y es que hasta ahora lo que se ha venido prohibiendo sistemáticamente es la verdad.”
F. NIETZSCHE, Ecce homo
y segundo, un buen documental de la BBC: NIETZSCHE, Humano, demasiado humano