14ª ETAPA

Avanzamos en nuestras exploraciones, en nuestras búsquedas, y el final de nuestro recorrido ya se vislumbra por el horizonte.
Pero no; no terminamos aún: todavía nos quedan investigaciones que realizar, pesquisas que llevar a cabo.
Queda poco, muy poco, pero seguimos.

Y para ir concluyendo como el concurso merece y sobre todo como merecen los arriesgados, osados y heroicos exploradores que a él se han dedicado, lo que queda tiene que estar a sus enormes, inmensas alturas.

¿Seréis capaces de recomponer unos trozos, de ensamblar unas piezas, de remendar unos fragmentos rotos y dispersos? Vamos a verlo; vamos a ir viéndolo.






PUZLE







Lo que buscamos, en esta ocasión, se nos da descompuesto, fraccionado, desestructurado, roto en definitiva, como si de un puzle se tratara.



1ª PIEZA:
Tuvo una muerte violenta

Podría ser, entonces…

SÉNECA, el filósofo cordobés, condenado a muerte por el que fue su pupilo, como quedó reflejado aquí al lado; o J. F. KENNEDY, presidente de los EE.UU., asesinado el 22 de noviembre de 1963, en Dallas, Texas; o Albert CAMUS, otro de nuestros Más grandes, que murió en un accidente de coche el 4 de enero de 1960 en Villeblerin, Francia; o Primo LEVI, que también lo tenemos por aquí al lado, que muere en extrañas circunstancias al caer, dicen algunos, o arrojarse, consideran otros, por una escalera el 11 de abril de 1987.

SÍ, podrían ser ellos, cualquiera de ellos; pero no lo es ninguno.


2ª PIEZA:
Avisó de la tragedia pero nadie le hizo caso.

Podría ser, entonces…

Ese ADIVINO que advirtió a Julio César con aquello de ‘Cuídate de los idus de marzo’, y que, incluso el mismo día de la muerte de César, y cuando éste, burlándose de él y de su vaticinio le dijo ‘Ya han llegado los idus’, le volvió a avisar ahora ya definitiva e infructuosamente con 'Sí, César, pero aún no han terminado’. O ese religioso cristiano, RONALDO, que ya en la primera parte del tercer partido del siglo levantaba ostensiblemente los brazos reclamando al equipo y al banquillo como diciendo ‘como sigamos jugando así nos pasan por encima, nos machacan’

SÍ, podrían ser ellos, cualquiera de ellos; pero no lo es ninguno.




TAREA: ¿Está clara, no?: Encontrar lo que buscamos.

Por cada pieza que aparezca del puzle, se permiten dos respuestas a todo explorador-aventurero-concursante.
Las respuestas tienen que ir debidamente documentadas y justificadas

PUNTUACIONES:
• Acertar en este momento, con dos piezas solo, el objeto de búsqueda: 50 puntos.
• Primera respuesta para cada una de las piezas-pistas, aun no dando la respuesta correcta pero estando debida y correctamente documentada: 10 puntos
• Resto de respuestas documentadas correctamente: 5 puntos.

PRÓXIMAS PIEZAS, el miércoles 4 de mayo, y por tanto, PLAZO para las respuestas de las dos primeras piezas, ése mismo, hasta 4 de mayo, 20:00 horas.

13ª ETAPA

Parecía que nunca llegarían pero aquí están. Al fin, ¡¡¡estamos de vacaciones!!!

Sí, por unos días, ¡¡¡VACACIONES!!!


Pero no por eso vamos a dejar el concurso.

Así pues, aquí una nueva etapa.

Y no una más, una cualquiera, sino una especial… y especialmente difícil, y no sólo por el número de la misma - para temores y temblores de supersticiosos-, sino porque lo que vamos a buscar es quizás lo más difícil que hayamos buscado nunca hasta ahora.

Y además de buscar, tendremos que crear.


Buscamos precisamente lo que nos trajo originalmente hasta aquí, hasta este blog; vamos a buscar lo que somos.

Veníamos de un río convertido en instituto, mezclado o confundido con una asignatura. Y dimos un paso más: nos transformamos en seguidores, perseguidores de vientos. Y eso es lo que vamos a buscar:

VIENTOS

Sí, sí, vientos. Pero ¿cómo encontrarlos? ¿cómo localizarlos? ¿cómo hacerlos llegar hasta aquí? ¿cómo materializar lo intangible? Hagamos posible lo que, en principio, es imposible. Porque eso mismo es la constante de la naturaleza y la acción humana.


Si conseguir vientos puede ser extremadamente complicado, más factible puede ser convertir la tarea en una


POÉTICA DEL VIENTO


Escudriñemos el mundo que nos rodea pero hagámoslo con ojos creadores que sean capaces de descubrir lo inédito, lo original, lo insospechado, lo que se esconde, incluso, en las cosas más cotidianas.


Revelemos la otra cara de la realidad, sus múltiples facetas, demostrando que una cosa puede ser eso mismo pero a la vez otra muy distinta.


Vayamos al encuentro de los vientos allá dónde éstos puedan aparecer. Pero más aún, forjémoslos nosotros mismos, hagámoslos aparecer incluso donde antes nunca nadie los había presentido siquiera.


Demostremos que somos, que tenemos que ser, exploradores, expedicionarios, sí, descubridores de lo real; pero también aventureros de la creación, creadores de la realidad.



¿DÓNDE ENCONTRAR VIENTOS? En muchos lugares, en una multitud de territorios, en una inmensa diversidad de objetos. ¡APRENDER A MIRAR! ¡ATREVEOS A VER!





VIGILANTES de los vientos, llamadas, por algunos, veletas; como ésta que se encuentra aquí mismo en la cabecera de este blog




GIGANTES guerreros, que luchan titánicamente contra los vientos con sus brazos triformes. Hay quien los confunde con molinos (¿o la confusión era al revés?).








DEPÓSITOS que probablemente sirvan de almacenes de vientos, donde se recogen y guardan vientos por si algún día faltasen...




REFUGIOS donde los humanos se protegen de los vientos, pero también se han visto vientos resguardándose en ellos, defendiéndose de los seres humanos










Generadores, productores de VIENTOS NEGROS. No os dejéis engañar por su aspecto simple, inofensivo, por su pequeño tamaño. Producen aires mefíticos.







la TAREA: se trata, pues, de una BÚSQUEDA POÉTICA, de una actividad de exploración y creación con las siguientes condiciones:


• Cada resultado constará de:


o Una fotografía del objeto localizado y seleccionado


o La inclusión, en la medida de lo posible, del sujeto participante junto a ese objeto, demostrándose de este modo que la localización del objeto ha sido realizada por el participante. Nada de extraer imágenes de titogoogle. Es decir, fotografías originales en las que aparezca el objeto referido y el sujeto concursante.


o Dos, tres, cinco líneas de justificación artística de la relación del objeto con el viento



• Los exploradores-concursantes podrán presentar tantos resultados como puedan y quieran.


• El envío de resultados podrá realizarse durante todo el plazo de la etapa


• Cada uno de los resultados presentados será valorado y puntuado por separado, por lo que a más resultados presentados, mayor puntuación.


• Las fotografías anteriores de arquitecturas del viento han sido ofrecidas solo a título de ejemplo, pero podrán ser utilizadas como referencia por los exploradores.


PLAZO: desde ahora mismo, desde ya hasta el sábado 30 de abril, 24:00 horas.


PUNTUACIONES:


• 15 puntos para la primera exploración creadora enviada.


• Para el resto de resultados, una puntuación de hasta 10 puntos, en función del valor artístico de la localización y la justificación poética de su relación con los vientos.









Las tempestades, quizás nadie pueda detenerlas, pero alguien tiene que avisar de ellas, prevenirnos de que llegan, alertar de la desolación que provocan, vigilarlas. Alguien tiene que permanecer despierto cuando todos están dormidos (de EL LIBRO DE VISITAS) .




¿HASTA DÓNDE PUEDE LLEGAR EL SER HUMANO?









“El viaje no duró más que veinte minutos. Después el camión se paró y apareció una gran puerta, y encima de ella una leyenda vivamente iluminada (su recuerdo todavía me atormenta en sueños): ARBEIT MACHT FREI, ‘el trabajo os hará libres’.

Bajamos, nos hicieron entrar en una habitación grande y desnuda, débilmente caldeada. ¡Qué sed teníamos! El débil ruido del agua de los radiadores nos volvía locos: no habíamos bebido desde hacía cuatro días. Y, sin embargo, hay un grifo; encima, un cartel que dice que está prohibido beber porque el agua está contaminada. Tonterías; a mí me parece claro que el cartel es una burla, ‘ellos’ saben que nos morimos de sed, y nos meten en una habitación y hay un grifo. Bebo, y animo a hacerlo a los compañeros; pero me veo obligado a escupir, el agua está tibia y tiene un sabor dulzón, huele a charca.

Esto es el infierno. Hoy, en nuestros días, el infierno debe ser así, una habitación grande y vacía, y nosotros cansados de permanecer de pie, y hay un grifo que gotea y el agua no se puede beber, y nosotros esperamos algo seguramente terrible y no pasa nada y sigue no pasando nada. ¿Cómo pensar? No se puede pensar, es como ya estar muertos. Alguno se sienta en el suelo. El tiempo pasa, gota a gota.

No hemos muerto; la puerta se abre y entra un SS, fuma. Nos mira sin prisa, pregunta: -‘Wer kann Deustsch’ (¿Quién habla alemán?) Se adelanta uno de nosotros al que jamás había visto, se llama Flesh; él será nuestro intérprete. El SS inicia tranquilamente un largo discurso: el intérprete traduce. Es necesario ponerse en filas de a cinco, con una separación de dos metros entre hombre y hombre; después hay que desnudarse y hacer de una determinada manera un paquete con la ropa, por un lado las prendas de lana y por el otro el resto de la ropa, quitarse los zapatos teniendo cuidado de que no nos lo roben.


(...) Ahora empieza el segundo acto. Entran violentamente cuatro individuos con navajas de afeitar, brochas y máquinas de pelar, llevan pantalones y chaquetas de rayas, un número cosido en el pecho; tal vez pertenecen a la misma categoría que los de esta tarde (¿de esta tarde o de ayer tarde?); pero éstos están fuertes y lustrosos. Nosotros hacemos muchas preguntas, ellos, por el contrario, nos sujetan con fuerza y en un momento nos encontramos pelados y rapados. Los cuatro hablan una lengua que no parece de este mundo, no es alemán, porque yo entiendo un poco el alemán.

Por último, se abre una puerta: nos vemos de pronto encerrados, desnudos, rapados y de pie, con los pies en el agua, es una sala de duchas. Estamos solos, poco a poco el estupor se desvanece y hablamos, todo el mundo pregunta y nadie responde. Si estamos desnudos en la sala de duchas, quiere decir que vamos a ducharnos. Si nos vamos a duchar es porque de momento no nos van a matar. Y entonces, ¿por qué nos hacen permanecer de pie, pro qué no nos dan de beber? Nadie se explica lo que ocurre, y no tenemos ni zapatos, ni ropa, sino que estamos todos desnudos, con los pies en el agua, y hace frío, y llevamos viajando cinco días, y no podemos ni siquiera sentarnos. ¿Y nuestras mujeres?

El ingeniero Levi me pregunta si pienso que también nuestras mujeres estarán como nosotros en este momento, y dónde están, y si las podremos volver a ver. Yo le respondo que sí, porque él está casado y tiene una niña; seguro que las volveremos a ver. Pero mi idea es que todo esto es una gran máquina para reírse de nosotros y vilipendiarnos, y que luego nos van a matar; quien piense que va a sobrevivir está loco, quiere decir que está acabado, yo no, yo sé que pronto acabará todo, seguramente en esta misma habitación, cuando se hayan aburrido de vernos desnudos, saltando de un pie al otro, intentando de vez en cuando sentarnos en el suelo, pero hay tres dedos de agua fría y no nos podemos sentar.

Vamos y venimos sin orden ni concierto, y hablamos, todos con todos, lo que produce un gran alboroto.


(...) Estamos en Monowitz, cerca de Auschwitz, en la Alta Silesia: una región habitada por alemanes y polacos. Este campo es un campo de trabajo, en alemán se dice Arbeitslager, todos los prisioneros (casi diez mil) trabajan en una fábrica de neumáticos que se llama la Buna, por eso el campo mismo se llama Buna.

Nos darán zapatos y ropa, no, no los nuestros; otros zapatos, otra ropa, como los suyos. Ahora estamos desnudos porque nos espera la ducha y la desinfección, que tendrán lugar inmediatamente después del toque de diana, porque en el campo no se puede entrar sin haber sido desinfectado primero. Claro que habrá que trabajar, todo el mundo aquí debe trabajar.


(...) Al toque de campana se oyó al campo despertarse, oscuro. Inesperadamente, el agua empezó a salir hirviendo de las duchas, cinco minutos de felicidad, pero enseguida irrumpen cuatro individuos (quizá se trata de los barberos) que nos empujan, mojados y humeantes, a gritos y empellones, a la habitación de al lado, que está helada; aquí otra gente voceándonos nos tira encima no sé qué trapos y nos arroja en las manos un par de zapatos con suela de madera; cuando nos queremos dar cuenta ya estamos fuera, sobre la nieve azul y gélida del alba, y, descalzos y desnudos con todo el equipo en la mano, tenemos que ir a otro barracón a unos cien metros. Aquí se nos permite vestirnos.

Cuando terminamos, cada uno permaneció en su rincón, y no osamos mirarnos los unos a los otros. No hay ningún espejo, pero nuestro aspecto lo tenemos delante, reflejado en cien rostros lívidos, en cien espantajos miserables y sórdidos. Aquí estamos, convertidos en los fantasmas que vimos ayer por la tarde.

Entonces, por primera vez, nos dimos cuenta de que en nuestra lengua no hay palabras para expresar esta ofensa, la demolición de un hombre. En un instante, con intuición casi profética, la realidad se nos reveló: hemos tocado fondo. Más bajo no podemos caer; no hay condición humana más miserable, y no es siquiera imaginable. Nada nos pertenece ya: nos han quitado las ropas, los zapatos, incluso el pelo; si hablásemos, no nos escucharían, y si nos escuchasen, no nos entenderían. Nos quitarán también el nombre, y si queremos conservarlo, tendremos que encontrar en nosotros la fuerza de hacerlo, de conseguir que detrás del hombre, permanezca aún algo de nosotros, de nosotros como éramos.

Sabemos que en esto será difícil que se nos comprenda, y está bien que así sea. Pero que cada uno piense cuánto valor, cuánto significado se encierra también en la más pequeña de nuestras costumbres cotidianas, en los cientos de objetos nuestros que el más humilde mendigo puede poseer: un pañuelo, una vieja carta, la fotografía de una persona querida. Estas cosas forman parte de nosotros, casi como miembros de nuestro cuerpo; si es concebible que nos priven de ellas en nuestro mundo, enseguida encontramos otras con las que sustituirlas, otros objetos que son nuestros y que custodian y suscitan nuestros recuerdos. Imagínese ahora a un hombre al cual, además de las personas amadas, le quitan su casa, sus costumbres, su ropa, todo, literalmente todo lo que posee; será un hombre vacío, reducido a sufrimiento y necesidad, privado de dignidad y discernimiento; porque le ocurre fácilmente, al que lo ha perdido todo, de perderse a sí mismo; de tal modo que se podrá sin miramientos decidir sobre su vida o su muerte más allá de todo sentimiento de afinidad humana, tomando, en el mejor de los casos, como criterio de juicio la utilidad. Se comprenderá entonces el doble significado de la expresión ‘Campo de aniquilación’ y quedará claro lo que queremos expresar con esta frase: yacer sobre el fondo.”


PRIMO LEVI, ‘Si esto es un hombre’

El hombre que dice no/ 2

Ara que som junts diré el que tu i jo sabem i que sovint oblidem:
Hem vist la por ser llei per a tots.
Hem vist la sang -que sols fa sang- ser llei del món.
No, jo dic no, diguem no. Nosaltres no som d’eixe món.
Hem vist la fam ser pa dels treballadors.
Hem vist tancats a la presó homes plens de raó.
No, jo dic no, diguem no. Nosaltres no som d’eixe món.
No, diguem no. Nosaltres no som d’eixe món.

RAIMON, Diguem no (1963)



Ahora que estamos juntos diré lo que tú y yo sabemos y que a menudo olvidamos:

Hemos visto al miedo ser ley para todos.

Hemos visto la sangre -que sólo hace sangre- ser ley del mundo. No, yo digo no, digamos no. Nosotros no somos de ese mundo. Hemos visto el hambre ser pan de los trabajadores.

Hemos visto encerrados en la prisión hombres llenos de razón.

No, digo no, digamos no. osotros no somos de ese mundo.

No,digamos no. Nosotros no somos de ese mundo.


Y se puede oír; que vale la pena ¡¡Aquí!!


Manifiesto

Juventud SIN futuro


Nosotras y nosotros, la juventud sin futuro, nos dirigimos a la opinión pública para mostrar nuestro desacuerdo con la política de recortes sociales del Gobierno, y la consecuencia más grave y con mayor impacto en el futuro que estas medidas representan: la juventud más preparada de nuestra historia vivirá peor que sus padres.

La agresión contra el colectivo juvenil en un escenario de crisis capitalista, con una tasa de paro juvenil del 40%, la más alta de la UE, se materializa principalmente en tres medidas:


o La Reforma laboral, que aumenta la temporalidad de nuestros contratos, la flexibilidad laboral y supone la desaparición de la negociación colectiva, convirtiéndonos en trabajadores precarios/as de por vida

o La Reforma del sistema de pensiones, que retrasa la edad de jubilación y reduce la cuantía de nuestras futuras pensiones y nos dificulta aún más encontrar un trabajo digno. Todo ello nos plantea un horizonte sin futuro

o La mercantilización de la Educación pública, que apuesta por la rentabilidad privada, y no por la formación y el conocimiento. Una universidad de élite para una minoría y fábrica de precarios para una mayoría, con medidas que se concretan en una nueva selectividad que pone trabas al acceso a la universidad y en la degradación de la formación profesional.


Somos las y los jóvenes a quienes las élites económicas y las políticas de nuestros gobiernos nos quieren convertir en la generación sin formación ni trabajo ni pensión digna. Aquellos que, además, no tendremos casa en nuestra vida, desde que los especuladores hicieron del derecho a la vivienda un negocio con el que enriquecerse; un modelo de crecimiento económico que ha fracasado y ha generado esta crisis. Hemos tomado conciencia de que las medidas de salida a la crisis económica se han realizado a través de una constante socialización de las pérdidas. Frente a la salida de la crisis por la derecha, nosotras y nosotros, la generación precaria, señalamos a los culpables y reivindicamos ser escuchados.

Queremos recuperar nuestra capacidad para ser actores de un motor de cambio, combatiendo un país de precariedad, desempleo y privatización de nuestra educación. Somos además conscientes de que la movilización y la lucha tienen sentido, pero sobre todo de que son necesarias. Italia, Francia, Grecia o Islandia nos enseñan que la movilización es indispensable. El mundo árabe nos demuestra que la victoria es posible. Por eso llamamos a un ciclo de movilizaciones que recuperen la voz de la juventud en la calle, y lo hacemos extensivo a la sociedad civil. Nosotras no nos fiamos, sabemos que esto sólo lo solucionamos sin los que causaron esta crisis. Instamos a emprender la movilización colectiva, a reivindicar nuestro derecho a disentir, a reconstruir nuestro futuro. Los abajo firmantes, estudiantes y miembros de la comunidad educativa, jóvenes trabajadoras y jóvenes trabajadores, movimientos sociales, profesionales de la ciencia, la técnica; mundo de la cultura y de las artes dan respaldo con su firma a este llamamiento a la movilización.

«Nos habéis quitado demasiado, ahora lo queremos todo»


El hombre que dice no.

¿Qué es un hombre rebelde? Un hombre que dice no.

Pero negar no es renunciar: es también un hombre que dice sí desde su primer movimiento. Un esclavo, que ha recibido órdenes durante toda su vida, juzga de pronto inaceptable una nueva orden. ¿Cuál es el contenido de ese ‘no’? Significa, por ejemplo, ‘las cosas han durado ya demasiado’, ‘hasta ahora, sí; en adelante, no’ ‘vais demasiado lejos’ y también ‘hay un límite que no pasaréis’ en suma, ese no afirma la existencia de un frontera. Vuelve a encontrarse la misma idea de límite en ese sentimiento del rebelde de que el otro ‘exagera’, de que extiende su derecho más allá de una frontera a partir de la cual otro derecho le hace frente y lo limita. Así, el movimiento de rebelión se apoya, al mismo tiempo, en el rechazo categórico de una intrusión juzgada intolerable y en la certidumbre confusa de un buen derecho; más exactamente, en la impresión del rebelde de que ‘tiene derecho a…’ La rebelión va acompañada de la idea de tener uno mismo, de alguna manera y en alguna parte, razón. En esto es en lo que el esclavo rebelado dice al mismo tiempo sí y no. Afirma, al mismo tiempo que la frontera, todo lo que sospecha y quiere preservar más acá de la frontera. Demuestra con obstinación, que hay en él algo que ‘vale la pena de…’, que exige vigilancia. De cierta manera opone al orden que lo oprime una especie de derecho a no ser oprimido más allá de lo que puede admitir. (...)


Lo que era al principio una resistencia irreductible del hombre, se convierte en el hombre entero que se identifica con ella y se resume en ella. Esa parte de sí mismo que quería hacer respetar la pone entonces por encima de lo demás y la proclama preferible a todo, inclusive a la vida. Se convierte para él en el bien supremo. Instalado anteriormente en un convenio, el esclavo se arroja de un golpe ("puesto que es así...") al Todo o Nada. La conciencia nace con la rebelión. Pero se ve que es conciencia, al mismo tiempo, de un "todo" todavía bastante oscuro y de una "nada" que anuncia la posibilidad de que se sacrifique el hombre a ese todo. El rebelde quiere serlo todo, identificarse totalmente con ese bien del que ha adquirido conciencia de pronto y que quiere que sea, en su persona, reconocido y saludado; o nada, es decir, encontrarse definitivamente caído por la fuerza que le domina. Cuando no puede más, acepta la última pérdida, que le supone la muerte, si debe ser privado de esa consagración exclusiva que llamará, por ejemplo, su libertad. Antes morir de pie que vivir de rodillas.. (...)


Pero, para terminar, ¿esta rebelión y el valor que contiene no son relativos? En efecto, con las épocas y las civilizaciones parecen cambiar las razones por las cuales el hombre se subleva. Es evidente que un paria hindú, un guerrero del imperio Inca, un primitivo del África Central, o un miembro de las primeras comunidades cristianas, no tenían la misma idea de la rebelión. Se podría afirmar también, con una probabilidad extremadamente grande, que la idea de rebelión no tiene sentido en estos casos precisos. Sin embargo, un esclavo griego, un siervo, un condotiero del Renacimiento, un burgués parisiense de la Regencia, un intelectual ruso de la primera década de 1900 y un obrero contemporáneo, si bien podrían diferir con respecto a las razones de la rebelión, estarían de acuerdo, sin duda alguna, en cuanto a su legitimidad. Dicho de otro modo, el problema de la rebelión parece no adquirir un sentido preciso sino dentro del pensamiento occidental. (...)


Advirtámoslo antes de proseguir, el fundamento de ese valor es la rebelión misma. La solidaridad de los hombres se funda en el movimiento de rebelión y éste, a su vez, no encuentra justificación sino en esa complicidad. Tendremos, por lo tanto, derecho a decir que toda rebelión que se autoriza a negar o a destruir esta solidaridad pierde por ello el nombre de rebelión y coincide en realidad con un consentimiento homicida. Del mismo modo esta solidaridad fuera de lo sagrado sólo adquiere vida al nivel de la rebelión. Para ser, el hombre debe sublevarse pero su rebelión debe respetar el límite que descubre ella misma, allí donde los hombres, al juntarse, comienzan a ser. El pensamiento rebelde no puede, por lo tanto, prescindir de la memoria: es una tensión perpetua. Al seguirlo en sus obras y sus actos tendremos que decir siempre si permanece fiel a su nobleza primera o si, por cansancio y locura, la olvida contrariamente, en una embriaguez de tiranía o de servidumbre.


Entre tanto, he aquí el primer progreso que el espíritu de rebelión hace realizar a una reflexión anteriormente imbuida de la absurdidad y de la aparente esterilidad del mundo. En la experiencia absurda el sufrimiento es individual. A partir del movimiento de rebelión, tiene conciencia de ser colectivo, es la aventura de todos. El primer progreso de un espíritu extrañado consiste, por lo tanto, en reconocer que comparte esa extrañeza con todos los hombres y que la realidad humana, en su totalidad, sufre a causa de esa distancia en relación con ella y con el mundo. El mal que experimentaba un solo hombre se convierte en una peste colectiva. En nuestra prueba cotidiana la rebelión desempeña el mismo papel que el "cogito" en el orden del pensamiento: es la primera evidencia. Pero esta evidencia saca al individuo de su soledad. Es un lazo común que funda en todos los hombres el primer valor. Yo me rebelo, luego nosotros somos.


A. CAMUS, El hombre rebelde



Aquí mismo, se puede leer más:
A. Camus, El hombre rebelde (selección)

Pensar la vida

Las preguntas de la filosofía no son preguntas que tengan una respuesta instrumental. Lo que tienen son respuestas parciales que sirven para profundizar en las mismas preguntas. Cada vez que termino de leer un libro sobre la libertad, por ejemplo, no tengo resuelto ni cancelado ese problema. No es que el problema de la libertad deje ya de interesarme y abandone totalmente la cuestión. Al contrario, con las respuestas que pueda haber obtenido profundizaré en mi pregunta sobre la libertad.


Las respuestas de la filosofía son de tal clase que, en lugar de cancelar las preguntas, las ahondan. Yo muchas veces he dicho que la filosofía no es para salir de dudas sino para entrar en dudas. Precisamente, la filosofía es lo que nos permite entrar en dudas, profundizarlas, estilizarlas, enriquecerlas. Es decir, la filosofía quizás no sea propiamente una sabiduría, sino una ignorancia enriquecida, una ignorancia de alguna forma vitalizada, una ignorancia consciente de lo que no sabe. Porque hay dos puntos fundamentales a los que se atiene el filósofo.

Por un lado, admitir que es mejor saber que no saber. En este sentido, el filósofo se enfrenta al místico, se enfrenta al visionario, se enfrenta a toda forma de irracionalismo. La filosofía cree que es mejor saber, en el sentido humano, racional y experimental del término, que no saber.

Por otro lado, es mejor saber que no se sabe que creer que se sabe sin saber. Es decir, resulta mejor que conozcamos los límites de nuestro conocimiento. Es mejor que sepamos que ciertas cosas que damos por sabidas en realidad no las sabemos. Y esta es también la tarea de la filosofía. El método socrático no consistía en ir dando lecciones a los demás, sino en ir despertándoles al desconocimiento de cosas que creían saber.


La persona común cree que conoce por dónde se mueve y qué es el mundo en que se encuentra, pero en realidad no tiene las claves de ese mundo, quizás porque no las podamos tener o quizás porque el conocimiento de esas claves nos lleve toda la vida. Y tal vez porque saber qué es la libertad, el tiempo, la muerte, la belleza, y todo lo demás, sea, en el fondo, nuestra tarea, nuestra tarea de ir enriqueciendo nuestra experiencia, nuestra autopercepción como seres humanos.


Hegel llamó en una de sus obras a "pensar la vida". Esa es la tarea: pensar la vida, pensar qué significa estar con vida para un ser humano que se sabe mortal. Todos sabemos, más o menos, qué es la vida. A un cierto nivel, todos sabemos lo que es engendrar, lo que es enfermar, lo que es trabajar, lo que es ganar dinero o morir. Todos tenemos unas ciertas nociones suficientes, quizás, para un nivel empírico, sobre todas esas cosas. Pero lo que dice Hegel se refiere a qué podemos pensar de todo eso. Si yo sé que me pasan cosas como nacer, envejecer, enamorarme, desenamorarme, trabajar, quizás me pasará también morir, por improbable que parezca, pero ¿qué tengo yo que pensar de todas esas cosas?


Esa es la pregunta que hace la filosofía. Por ejemplo, sabemos lo que es vivir, porque de hecho estamos ya viviendo, pero ¿qué significa realmente vivir?


F. SAVATER, Necesidad de la filosofía en un mundo globalizado


De una conferencia del autor en Chile.

La conferencia completa:


Necesidad de La Filosofia en Un Mundo Globalizado

Crear es resistir. Resistir es crear.

Cuando se cumplió el sesenta aniversario del Programa de la Resistencia, proclamado en 1944 por el Consejo Nacional de la Resistencia, cuando Francia todavía se hallaba ocupada por el ejército nazi, ATTAC ( Asociación por la Tasación de las Transacciones y por la Ayuda a los Ciudadanos) – Francia quiso conmemorar tal acontecimiento reuniendo a algunos de los más destacados supervivientes de aquel Consejo.

En la reunión, esos supervivientes firmaron un nuevo LLAMAMIENTO A LA RESISTENCIA.

Éste que se incluye a continuación:


LLAMAMIENTO A LA RESISTENCIA

8 de marzo de 2004


Llamamiento para conmemorar el Sexagésimo aniversario del Programa del Consejo Nacional de la Resistencia del 15 de marzo de 1944.


Cuando actualmente vemos abandonar las conquistas sociales de la Liberación, los veteranos de los movimientos de Resistencia y de las fuerzas combatientes de Francia Libre (1940-1945) convocamos a las jóvenes generaciones a vivir y a transmitir la herencia y los ideales siempre actuales de la democracia económica, social y cultural.


Sesenta años más tarde, el nazismo está vencido, gracias al sacrificio de nuestros hermanos y hermanas de la Resistencia y de las naciones unidas contra la barbarie fascista. Su amenaza sin embargo, no ha desaparecido totalmente y nuestra indignación contra la injusticia se mantiene intacta.


Convocamos, ardientemente, a conmemorar la actualidad de la Resistencia, no en provecho de las causas partisanas o de su instrumentalización por las apuestas del poder, sino para proponerles a las generaciones futuras cumplir con tres gestos humanitarios y profundamente políticos en el verdadero sentido de este término, para que la llama de la Resistencia no se extinga nunca:


Convocamos en primer lugar a los educadores, a los movimientos sociales a las colectividades públicas, a los artistas, a los ciudadanos, a los explotados, a los humillados a conmemorar juntos el aniversario del Programa del Consejo Nacional de la Resistencia (C.N.R.) aprobado en la clandestinidad el 15 de marzo de 1944: seguridad social y pensiones, "control de los feudos económicos", el derecho a la educación y a la cultura, una prensa independiente del dinero y de la corrupción, leyes sociales obreras y agrícolas, etc. para todos. ¿Cómo es posible que hoy en día no haya recursos para mantener y ampliar estas conquistas sociales, cuando, desde la Liberación, en una época en que Europa estaba arruinada, se ha producido un considerable aumento de la riqueza?. Los responsables políticos, económicos e intelectuales y el conjunto de la sociedad no deben dejarse impresionar por la actual dictadura internacional de los mercados financieros que amenazan a la paz y a la democracia.


Convocamos además a los movimientos, a los partidos, a las asociaciones, a las instituciones y a los sindicatos herederos de la Resistencia a superar sus luchas sectoriales y a consagrarse prioritariamente a las causas políticas relacionadas con las injusticias y los conflictos sociales y no solamente a sus consecuencias, a diseñar juntos un nuevo "Programa de Resistencia" para nuestro siglo, conscientes de que el fascismo se nutre siempre de racismo, de intolerancia y de guerra a los que también alimentan las injusticias sociales.


Convocamos también a los niños, los jóvenes, los padres, los ancianos y los abuelos, a los educadores, a las autoridades a emprender una verdadera y pacífica insurrección contra los medios masivos de comunicación de masas que no proponen a nuestra juventud otro horizonte que el del consumo masivo, el desprecio por los más débiles y por la cultura, una amnesia generalizada y una competencia a ultranza de todos contra todos. No aceptamos desde ahora en adelante que los principales medios estén controlados por los intereses privados, contrariamente a lo que establece el programa del Consejo Nacional de la Resistencia y las ordenanzas sobre la prensa de 1944.


Hoy, más que nunca, queremos decirles con afecto a quienes construirán el siglo que apenas comienza: "Crear es resistir. Resistir es crear".


Firmado: Lucie Aubrac, Raymond Aubrac, Henri Bartoli, Daniel Cordier, Philippe Dechartre, Georges Guingouin, Stéphane Hessel, Maurice Kriegel-Valrimont, Lise London, Georges Séguy, Germaine Tillion, Jean-Pierre Vernant, Maurice Voutey.


(Traducción: Susana Merino)


ATTAC tiene una sección en España que cuenta con una página web: http://www.attac.es
Las tempestades, quizás nadie pueda detenerlas, pero alguien tiene que avisar de ellas, prevenirnos de que llegan, alertar de la desolación que provocan, vigilarlas. Alguien tiene que permanecer despierto cuando todos están dormidos (de EL LIBRO DE VISITAS) .



¿HASTA DÓNDE PUEDE LLEGAR EL SER HUMANO?


Habrá muchos, individuos o pueblos, que piensen, más o menos conscientemente que ‘todo extranjero es un enemigo’. En la mayoría de los casos esta convicción yace en el fondo de las almas como una infección latente; se manifiesta sólo en actos intermitentes e incoordinados, y no está en el origen de un sistema de pensamiento. Pero cuando éste llega, cuando el dogma inexpresado se convierte en la premisa mayor de un silogismo, entonces, al final de la cadena está el Lager. Él es producto de un concepto del mundo llevado a sus últimas consecuencias con una coherencia rigurosa; mientras el concepto subsiste las consecuencias nos amenazan. La historia de los campos de destrucción debería ser entendida por todos como una siniestra señal de peligro.


PRIMO LEVI,Si esto es un hombre’




Pero puede haber algo aún más profundo que ver al extranjero como enemigo, que el otro visto como contrario:



Elie Ngarambe, un asesino hutu, explica que los asesinos “no sabían que los otros fueran seres humanos, porque si hubieran pensado eso no los habrían matado. Déjenme incluirme también a mí como alguien que lo aceptaba: yo no habría admtidio que ellos (los tutsis) son seres humanos”. La consecuencia de esto, según él: “Es una nube que entró en los corazones de las personas y los cubrió, y todo se volvió oscuro, porque ver a alguien de pie delante de ti, sin ninguna energía, y que tú sostienes en alto tu machete o un palo y le golpeas… es algo difícil, que se hacía con mucha rabia y furia”.

(…) Ngarambe pasa revista a los acontecimientos con comprensión pero también con cierto grado de incredulidad, por cómo él y los demás pudieran acuchillar a la gente: “No puedo encontrar una forma para explicarlo, pero la única respuesta que consigo es que fue como una nube, algo parecido a la oscuridad. Yo lo llamo ignorancia”. A continuación se corrige a sí mismo, porque aunque las cosas venenosas que todos ellos pensaban de los tutsis eran una especie de ignorancia, “sin embargo, no es ignorancia. Con lo que trabajábamos era con la crueldad. Ngarambe me mostró lo que hacían, su crueldad, con movimientos cortantes de gran precisión de sus manos, enseñándome cómo los hutus “cortaban” a sus víctimas “a pedazos”: “Ves, el machete se sujetaba así. Un tajo y, a continuación lo tirabas al suelo y lo cortabas en pedazos. Pero el arma más corriente era un garrote. Le golpeabas y le machacabas la cabeza. Con un machete era como cortar un árbol bananero. La única diferencia es que la carne es blanda y el árbol es duro. A una persona le das un tajo una vez y la segunda vez está hecha pedazos”.


D.J. GOLDHAGEN, Peor que la guerra



worldressphoto 1994

SOBRE HÉROES Y TUMBAS
tomado del título una obra de E. SABATO.

I. KANT murió el 12 de febrero de 1804, naturalmente en la misma ciudad que lo vio nacer, Konigsberg; y allí, en su catedral, fue enterrado.

En la segunda guerra mundial, la catedral, y con ella la tumba, fue arrasada por las bombas.

Al final de la guerra, la ciudad pasó a manos soviéticas y cambió su nombre por el de Kaliningrado. Se reconstruyó su tumba (lo mejor que se pudo) y actualmente así se puede contemplar:








Cerca de la misma se dispuso una placa conmemorativa,


donde, en alemán y en ruso, aparece una cita del propio Kant tomada de su obra Crítica de la Razón Práctica.


Precisamente las últimas líneas de esa obra:



Dos cosas llenan mi ánimo con una nueva y siempre creciente admiración y respeto: el cielo estrellado sobre mí y la ley moral dentro de mí.

EL TIRANO


Por lo tanto, en realidad y aunque alguien no lo crea, el auténtico tirano resulta ser auténtico esclavo, sujeto a las más bajas adulaciones y servidumbres, lisonjeador de los hombres más perversos, totalmente insatisfecho en sus deseos, falto de multitud de cosas y verdaderamente indigente si aprendemos a mirar en la totalidad de su alma; henchido de miedo durante toda su vida y lleno de sobresaltos y dolores si de veras se parece su disposición a la de la ciudad que gobierna.


PLATÓN, La República, libro IX



Pero, ¿de dónde surge la tiranía? ¿cómo se crea el tirano?

Platón sigue respondiendo:


PLATÓN, crítica de la democracia

12ª ETAPA

Por fin, ¡¡¡¡¡hemos terminado exámenes!!!!! ¡¡ENHORABUENA!!
Desde luego que esto merece una buena celebración, naturalmente.

Y qué mejor que un buen paseo reparador, ahora que el tiempo y el campo están de primavera. Pero, eso sí, bien pertrechados que vamos de escalada.

Sí, de escalada, de ascensión, de subida… porque vamos a buscar, nada menos y nada más que….(aquí debería oírse un redoble de tambor de expectación y de temor)

¡¡¡EL EVEREST!!!

Porque sí; es cierto, vivimos en una llanura, una meseta, la planicie de la Mancha, la Estepa manchega, pero aquí tenemos de todo (o casi).

En realidad, no buscamos el Everesteverest, el del mundo, el que todos conocen, el del Himalaya, el punto más elevado del planeta, el de los 8.848 metros



Tranquilos, que no buscamos éste de aquí.

Buscamos uno más cercano, el nuestro, el propio…





¡¡EL EVEREST DE LA MANCHUELA!!


Que como el Everest de verdad es el punto más alto de toda nuestra comarca y de altura es casi como él. Bueno, para ser más preciso, es casi el 10% del Everest asiático.

Y precisamente ahí, en nuestro Everest, está este chirimbolo (de nombre técnico, trastus rarum, en latín):




La TAREA: Encontrarlo, localizarlo, identificarlo y fotografiarse allí mismo. Es decir, se pide localización e identificación y fotografía demostrativa.

Y cuidado, que la foto tiene que ser efectiva y claramente demostrativa de haber estado allí, precisamente allí. No vale foto del sujeto con otro chirimbolo distinto a éste, que haberlos haylos más por la comarca.


La PISTA: Además de que es el punto más alto del planeta Manchuela, que tiene una altura casi del 10% del Everest himaláyico; otra más: se encuentra dentro de un radio de 15 kilómetros del IES Río Júcar.


PLAZO: desde ahora mismo, desde ya hasta el jueves 14 de abril (por cierto, conmemoración del 80º aniversario de la proclamación de la segunda República)


PUNTUACIONES:

• 20 puntos para primera respuesta correcta, siempre y cuando incluya fotografía que demuestre que el concursante ha hecho la escalada. No es necesario mostrar el sudor que la misma ha provocado. Si solo se produce la identificación y localización de la zona y del chirimbolo, sin fotografía demostrativa, 10 puntos.

• 15 puntos para segunda, tercera, cuarta y quinta respuestas completas (con foto)

• 10 puntos para respuestas sexta a décima respuestas completas

• 8 puntos para respuestas undécima a decimoquinta respuestas completas.

• 5 puntos para respuestas correctas posteriores con fotografía o para cualquier otra respuesta sin foto.


NOTA: En el viaje de búsqueda y exploración, se pueden ir tarareando canciones de Sabina; que muchos de vosotros os sabéis unas cuantas.

ATRÉVETE A SABER

La ilustración es la salida del hombre de su minoría de edad. El mismo es culpable de ella. La minoría de edad estriba en la incapacidad de servirse del propio entendimiento, sin la dirección de otro. Uno mismo es culpable de esta minoría de edad cuando la causa de ella no yace en un defecto del entendimiento, sino en la falta de decisión y ánimo para servirse con independencia de él, sin la conducción de otro. ¡Sapere aude! ¡Ten valor de servirte de tu propio entendimiento! He aquí la divisa de la ilustración. La mayoría de los hombres, a pesar de que la naturaleza los ha librado desde tiempo atrás de conducción ajena, permanecen con gusto bajo ella a lo largo de la vida, debido a la pereza y la cobardía. Por eso les es muy fácil a los otros erigirse en tutores. ¡Es tan cómodo ser menor de edad! Si tengo un libro que piensa por mí, un pastor que reemplaza mi conciencia moral, un médico que juzga acerca de mi dieta, y así sucesivamente, no necesitaré del propio esfuerzo. Con sólo poder pagar, no tengo necesidad de pensar: otro tomará mi puesto en tan fastidiosa tarea. Como la mayoría de los hombres (y entre ellos la totalidad del bello sexo) tienen por muy peligroso el paso a la mayoría de edad, fuera de ser penoso, aquellos tutores ya se han cuidado muy amablemente de tomar sobre sí semejante superintendencia. Después de haber atontado sus reses domesticadas, de modo que estas pacíficas criaturas no osan dar un solo paso fuera de las andaderas en que están metidas, les mostraron el riesgo que las amenaza si intentan marchar solas. Lo cierto es que ese riesgo no es tan grande, pues después de algunas caídas habrían aprendido a caminar; pero los ejemplos de esos accidentes por lo común producen timidez y espanto, y alejan todo ulterior intento de rehacer semejante experiencia. (...) Sin embargo, para esa ilustración sólo se exige libertad y, por cierto, la más inofensiva de todas las que llevan tal nombre, a saber, la libertad de hacer un uso público de la propia razón, en cualquier dominio. Pero oigo exclamar por doquier: ¡no razones! El oficial dice: ¡no razones, adiéstrate! El financista: ¡no razones y paga! El pastor: ¡no razones, ten fe! (Un único señor dice en el mundo: ¡razonad todo lo que queráis y sobre lo que queráis, pero obedeced!) Por todos lados, pues, encontramos limitaciones de la libertad. Pero ¿cuál de ellas impide la ilustración y cuáles, por el contrario, la fomentan? He aquí mi respuesta: el uso público de la razón siempre debe ser libre, y es el único que puede producir la ilustración de los hombres. El uso privado, en cambio, ha de ser con frecuencia severamente limitado, sin que se obstaculice de un modo particular el progreso de la ilustración.


I. KANT, ¿Que es la Ilustración? (1784)

El texto completo, aquí mismo, en PARA SABER aún MAS

APRENDER DE LOS QUE SABEN

LECCIÓN 7


BORJA, 1º Bachillerato

para 11ª etapa:


He empezado a leer la etapa número 11 y me ha llamado la atención la frase: "Una cota de malla contra las desdichas", la cual me ha recordado a la canción de Joaquín Sabina titulada La canción más hermosa del mundo. Tras haber disfrutado al escucharla, todavía no estaba concluido mi trabajo. He releído la pista, donde pone que se quiere mudar a la calle Alegría, pero que por ahora no lo ha conseguido. Entonces, he buscado en su discografía y he encontrado una canción que se llama Calle Melancolía. Una vez escuchada, sé que habita en la Calle Melancolía, número 7, pero él desea mudarse al barrio de la Alegría. Sin embargo, siempre que lo intenta ha salido ya el tranvía

APRENDER DE LOS QUE SABEN

LECCIÓN 6


PABLO I. , 1º Bachillerato

para 11ª etapa


Lo he sabido porque lo de pirata con un parche en el ojo, con pata de palo y cara de malo, me sonaba muchísimo de una canción de Sabina, pero no estaba seguro si era de Sabina o de Serrat, pero al ver que era del Atletico tenía que ser Sabina ya que Serrat es muy catalán